La Fundación Rafael del Pino acogió, el día 11 de abril de 2012, la Conferencia Magistral «Los retos del endeudamiento europeo: cómo hacer más con menos para proteger nuestros servicios públicos», que pronunció Francis Maude, Minister of the Cabinet Office del Gobierno Británico.
Francis Maude explicó cómo el Reino Unido está intentando reformar la administración británica: «Estamos intentando recortar el gasto público sin afectar a los servicios básicos y, en la medida de lo posible, sin afectar tampoco a los empleos del sector público, ya que conservar el empleo en un momento de débil crecimiento económico es una de las prioridades. Aun así, no se puede evitar por completo la pérdida de puestos de trabajo en el sector público. Decidimos además recortar el gasto en la parte administrativa y en la adquisición de suministros. Renegociamos los contratos con los grandes proveedores; nos hemos deshecho de aquellos edificios e instalaciones que no necesitábamos; hemos dejado de invertir en publicidad institucional, marketing e Internet; y estamos intentando, además, trasladar a plataformas online buena parte de los trámites administrativos para los ciudadanos en aquellos aspectos en los que los servicios públicos pueden ser canalizados a través de Internet. Se trata de un proceso difícil, pero que nos permite usar más eficientemente los recursos públicos y hacer que ese dinero nos dé para más».
Francis Maude habló del procedimiento seguido por el ejecutivo británico en su racionalización del gasto: «Tenemos cerca de 300 funcionarios trabajando en el Grupo de reforma y búsqueda de eficiencia que dependen de mi y del Secretario Jefe del Tesoro. Se trata de mantener bajo control cosas como las compras de suministros y hacerlas más eficientemente. Con eso hemos logrado grandes ahorros que son un anticipo de lo que está por llegar, sobre todo en capítulos como el gasto tecnológico o en inmuebles, la gestión de la administración civil… Vamos hacia una administración más pequeña pero más efectiva y con mayor capacidad de actuación para poder ampliar su radio de acción. Esta labor es la que desempeñaría, dentro de una empresa privada, un Director General: tratar los asuntos menos «glamourosos» que son necesarios atender y en los que las empresas gastan mucho dinero. Creemos que debemos a la ciudadanía y los contribuyentes el asegurarnos que hacemos un uso más racional de los recursos públicos, eliminando los gastos superfluos. Y eso es lo que estamos haciendo».
